A nivel confederal, CCOO es la primera fuerza sindical, al tener una representatividad del 35,55%. El reto para FECCOO es mantener y mejorar nuestro liderazgo. Ser el primer sindicato nos coloca en posición privilegiada ante administraciones y patronales, y nos garantiza visibilidad y credibilidad ante la sociedad.
Concurrimos a los procesos electorales en mejores condiciones que hace cuatro años. Entonces lo hicimos arropados por el liderazgo en la movilización contra los recortes y las contrarreformas educativas del PP, por haber contribuido a aglutinar a la comunidad educativa en esa lucha y por nuestra capacidad para proponer alternativas a los principales problemas educativos. En esta ocasión lo hacemos avalados, además, por acuerdos que suponen un cambio de tendencia en cuanto a los recortes y la pérdida de derechos, lo que permite iniciar la senda de la recuperación de lo arrebatado. Acuerdos en el Estado, y en la mayoría de las comunidades autónomas, son el resultado de años de lucha en defensa de nuestros derechos y de nuestra firme decisión de exigir, en justicia, a la salida de la crisis, el reparto del crecimiento de la economía.
El Consejo Confederal aprobó la puesta en marcha de una estrategia que se resumía en una frase: no puede haber crecimiento sin reparto. Esto se ha plasmado en resultados concretos como el incremento del SMI o el Acuerdo Estatal de Negociación Colectiva (AENC) que permiten no solo iniciar la recuperación del poder adquisitivo de los salarios, sino que suponen una apuesta por incrementar los ingresos más bajos a través de un salario mínimo de convenio de 14.000 euros al año.
También hemos conseguido importantes acuerdos en el ámbito de los empleados/as públicos/as que nos van a permitir consolidar el empleo, recuperar derechos laborales –como la IT o la jornada de 35 horas–, e iniciar la recuperación del poder adquisitivo de nuestros salarios.
La negociación descentralizada rinde asimismo resultados. A nivel autonómico estamos consiguiendo importantes acuerdos en materia de empleo, de retribuciones o de recuperación de derechos que nos permiten acudir a la cita electoral con resultados concretos fruto de nuestra acción reivindicativa.
El cambio de Gobierno y nuestra firmeza nos han permitido, además, avanzar en alguna de las reclamaciones más sentidas por los/as trabajadores/as del sector. En la primera reunión con el nuevo equipo del Ministerio de Educación, exigimos la derogación del RD 14/2012 y un escenario de derogación de la LOMCE y de elaboración de una nueva ley educativa, acompañado de un desmontaje urgente de los aspectos más regresivos de las políticas educativas del PP. Por lo que respecta a la derogación del 14/2012, hemos manifestado nuestra incomodidad con la fórmula elegida, que no garantiza su aplicación en este curso ni tampoco la recuperación de las 18 horas lectivas o la reducción de las ratios con carácter básico, porque el Gobierno ha dejado en manos de las comunidades autónomas la solución definitiva de estos asuntos.
Hemos exigido, también, la apertura de una negociación en torno a un sistema transitorio de acceso a la función pública docente que garantice un verdadero proceso de consolidación del empleo. Esta negociación debería anclarse en otra de mayor calado y más largo recorrido que no hemos olvidado: el Estatuto Docente.
En definitiva, abordamos los procesos de elecciones sindicales como referente de las movilizaciones de los últimos años, fortalecidos por nuestra capacidad de propuesta y por acuerdos firmados que suponen un cambio de tendencia en la destrucción de empleo, y marcan la senda de la recuperación. El reto es reforzar el liderazgo de CCOO, ganar las elecciones sindicales.
